8 outfits de oficina perfectos para ir a trabajar este otoño

Vestirse para trabajar no es tarea fácil. Ya podemos tener un armario lleno de ropa, que si se nos cruzan los cables, se nos cruzan y punto. Hoy queremos ayudarte a no desesperarte.   Queremos que te apetezca vestirte por las mañanas y que el cambio de estación sea motivo de celebración, no de desesperación.  A continuación te presentamos ocho outfits de oficina, perfectos para este otoño/invierno, que harán que las mañanas del ‘no sé qué ponerme’ queden bien, bien atrás.

1. Para las mañanas con prisas: accesorios

Vale, no ha sonado la alarma y tienes menos de media hora para hacerlo todo. Que no cunda el pánico. En mañanas como estas lo peor que puedes hacer es ponerte a combinar colores, así que apuesta por básicos para tus prendas principales y tira de accesorios más atrevidos. Ponte unos zapatos vistosos como estas bailarinas   Panthère Noire  veganas y sostenibles, hechas de terciopelo e hilo tipo lana, unos pendientes que iluminen tu cara y ¡listo! En menos de 10 minutos tendrás un outfit ideal y aún te sobrará tiempo para hacer todo lo demás.

2. Conviértete en Blair Waldorf por un día

Cuando hablamos de accesorios, solemos olvidarnos de un elemento muy importante: el pelo. Los accesorios de pelo pueden aportar mucho a un look, y este año estamos de suerte. Las diademas han vuelto, y lo han hecho pisando fuerte: cuanto más gordas y más   preppy, mejor. Así que quítale el polvo a la diadema que tienes escondida en el cajón y sácala a relucir con un outfit simple pero elegante. Nos encantan los pantalones de vestir porque no solo estilizan la figura, sino que además son muy cómodos. Hemos decidido combinar nuestro outfit con las   Python Velours, hechas de terciopelo de algodón ecológico, perfectas para cuando buscas algo simple pero que le dé ese toque extra a tu look. Blair Waldorf les daría el visto bueno.

3. Cómete el mundo con un buen   power suit

Y es que lo de que se llama   power suit  no es ninguna casualidad. Ponerse un traje tiene algo que hace que te sientas capaz de conseguir todo lo que te propongas y más. Además, es facilísimo combinarlo y por las mañanas cuanto menos tengamos que pensar, mejor. Combínalo con una camiseta simple, los pendientes y collares que más te gusten (a nosotras nos chiflan los toques dorados, pero el plateado queda igual de bien), y unas bailarinas clásicas como estas   Nuage Noir Velours  hechas de cuero ecológico, libre de cromo y de metal.

4. No guardes la falda satinada de este verano

No los llaman looks de transición por nada. Y es que en verano nos compramos ropa que nos encanta y no nos quitamos ni para dormir,  pero llega el otoño y parece que tenemos que pasar directamente a los jerseys y la bufanda cuando aún ni nos apetece, ni hace tanto frío como para ponérnoslos. Así que no guardes ni tus faldas ni tus vestidos y combínalos poniéndote tus jerseys por encima. Las faldas satinadas quedan genial con jerseys de punto y bailarinas, pero cualquier combinación funciona de maravilla. Para nuestro look hemos optado por las bailarinas   Lézard Rayé, perfectas tanto para el verano como para el invierno.

5. Una vuelta al cole con taconazos

El año pasado se llevaron mucho los pichis y aunque este año parecen verse menos, no por eso tenemos que dejar de llevarlos. Al contrario. La ropa está para usarla independientemente de lo que dicten las ‘temporadas’ o las pasarelas. Está bien inspirarse pero hay que evitar ser esclava de ellas. No tengas miedo de ponerte taconazos con un vestido más corto. Quedan de maravilla y te harán sentir igualita que Naomi Campbell. Nosotras hemos apostado por estos   Cobra Noir, con tacón hecho de madera 100%. Además, si no te sientes cómoda, siempre puedes ponerte medias y quedará ideal también.

6. Un toque de color para un giro de 180º

A veces basta con un toque de color para darle a tu outfit el giro que necesita. Las faldas de tubo son perfectas para los ambientes de trabajo con un código de vestimenta más estricto. Son un clásico que nunca falla. Pero quien dice estricto no tiene por qué decir aburrido. Cuando la vestimenta es limitada, apostar por el color es la jugada ganadora. Y no, con color no nos referimos a que tengas que pasarte al naranja butano o al amarillo neón. Pueden ser colores más discretos, como el rojo teja o el verde oliva (¿incluso los dos a la vez?). Sabemos lo mucho que estilizan unos zapatos de aguja con este tipo de looks, pero también sabemos lo mucho que machacan los pies. Te sugerimos que optes por invertir en unos zapatos que estilicen tu figura, como estas bailarinas   Lézard hechas de cuero ecológico.

7. Para las freelance: tenemos un look para vosotras también

No nos hemos olvidado de vosotras. Sabemos que no todo el mundo trabaja en una oficina. Estamos en una época en la que el trabajo remoto es una opción cada vez más viable. Así que para aquellas que sigan sus propias normas, os sugerimos que le saquéis partido a las opciones que tenéis en el armario sin olvidaros de estar cómodas, que tendréis que moveros de cafetería en cafetería, no os olvidéis. Abrocha los botones de tus chaquetas de punto o lana, y haz de ellas un jersey. Esta temporada parece que se va a centrar más en los vaqueros rectos, largos y acampanados que en los   mom jeans,  así que te sugerimos que los combines con unas bailarinas con un estampado como estas   Félin Noir, y al look le añadas unos buenos pendientes grandes y vistosos.

8.   Colour-blocking  para la falta de inspiración

Que no decaiga el ánimo. Sabemos que en invierno llega un momento en el que ya no tenemos inspiración y tiramos de los looks de siempre. Vestirse con colores puede resultar intimidante pero ¿y si te dijésemos que solo hace falta que elijas dos colores? Céntrate en una pieza que te guste y basa tu outfit a partir de ella. Nosotras hemos elegido las bailarinas   Boule de Neige, hechas de piel ovina ecológica. Una vez lo tengas, bastará con añadirle una pieza con un color llamativo para darle el toque final.